María Polite

SABER MÁS DE MI FORMACIÓN

  • Licenciada por la UPV (Universidad del País Vasco).
  • Habilitación como Psicóloga Sanitaria.
  • Psicoterapeuta socia Núm. 2772 de la Asociación EMDR España.
  • Cofundadora de Hazia Centro de psicoterapia en 2019.
  • Ejercicio de la psicoterapia desde 2013.
  • Directora de Centro Médico Pamplona (2013-2019)
  • Formación en Psicoterapia Gestalt (2012-2018). Instituto Ananda, formación reconocida y avalada por la AETG.
  • Formación en Terapia Corporal (2013) Instituto Ananda.
  • Formación en Risoterapia (2011). ENARI, Escuela Navarra de Risoterapia.
  • Formación en Terapia de Pareja desde el enfoque integrativo Sistémica-Gestalt (2017). Grazia Cechini.
  • Formación en EMDR (2013 y 2019). Asociación EMDR España.
  • El vínculo terapéutico con personas que consumen drogas.
    Un abordaje gestalt sobre adicciones (2021) . Organizado por Vínculo terapéutico, Uruguay. Hermman Schreck, Norma Martínez y Ana Frachelli.
  • Formación en Bioenergética Integrativa (2023). Bioenergética Integrativa Madrid.
  • Formación en Psicodrama en la escuela Gogrupos con Goyo Armañanzas (2022-2025)


ENFOQUES DESDE LOS QUE TRABAJO

El enfoque Gestalt es un enfoque humanista integrativo de abordaje psicoterapéutico que se centra sobre todo en la persona en el aquí y el ahora. Un trabajo que entiende al terapeuta como un/a acompañante no directivo que pone al servicio del/la paciente sus herramientas y conocimientos para que éste vaya poco a poco descubriéndose y dándose cuenta de cuáles son sus emociones, pensamientos, estados corporales, síntomas y actos y así poder adueñarse de todos ellos para hacer una revisión en profundidad de cuáles son las dinámicas desadaptativas que le llevan al sufrimiento y poder desde cambiarlas a hasta aceptarlas desde un lugar sano. Por ello, el espacio de terapia es un pequeño laboratorio donde el/la paciente puede permitirse explorar todas estas dimensiones desde la intimidad y el no juicio e ir integrando partes negadas y en sombra. En último término, buscamos la integridad de estas partes para que la persona tenga todas las herramientas posibles a su disposición para responder ante el entorno de una manera autónoma y adaptativa.


El enfoque corporal o bioenergética es una de las dimensiones del ser a la que, como terapeutas integrativos, damos voz y espacio. El cuerpo es donde se desarrolla el síntoma y donde libran sus batallas la emoción y la razón, por lo que puede tender a doler, a resentirse o a bloquearse. Por eso, la escucha intuitiva al cuerpo puede darnos mucha información genuina sobre nosotros/as mismos/as y nos da un tipo de trabajo transformador que la parte más racional tiende a descartar. Rescatamos esta dimensión desde la creencia de que el cuerpo tiene una tendencia a la autorregulación organísmica que nos habla de lo que necesitamos para sanar.

Las diversas técnicas psico-corporales (Bioenergética, Psicodrama, Programa SAT de Claudio Naranjo, expresión corporal y trabajo sobre sí), son herramientas que enriquecen un proceso de psicoterapia integrativa, en el que se trabaje integrando todos los ámbitos de la persona: la palabra, la emoción y la sensación corporal. Esto nos llevará a un nivel de comprensión y reparación psicoemocional más profundo.


La técnica EMDR, es decir, Reprocesamiento y Desensibilización a Través del Movimiento Ocular, es un abordaje psicoterapéutico integrativo que ha sido comprobado como efectivo para el tratamiento especialmente del trauma. Consiste en una estimulación bilateral del cerebro mediante un movimiento ocular o una estimulación de otro tipo, para simular el movimiento en fase REM del sueño, donde la información del día de reprocesa y almacena a largo plazo. Esta estimulación pretende acceder a información sobre todo disociada de acontecimientos pasados y presentes que contienen información tanto mental, como corporal y emocional


La Risoterapia es un enfoque terapéutico que puede llevarse al espacio psicoterapéutico de muchas maneras. No solo dedicamos la atención a la risa, ejercicio tanto corporal como emocional con incontables beneficios, sino también la parte de la risoterapia que busca el contacto con el niño interior, y es que hay una parte de él que si conseguimos rescatar puede ayudarnos a sanar heridas profundas dándole lo que un día necesito, y además conectarnos con el juego, el disfrute, la creatividad y la espontaneidad, asuntos que el adulto olvidó hace tiempo.